jueves, 17 de abril de 2008



María Regina García, mujer luchadora y emprendedora.

“HE SIDO PADRE Y MADRE PARA SACAR A MIS HIJOS ADELANTE”

Bien temprano en la mañana antes de comenzar con su rutina del día a día, María Regina García, de 49 años de edad, residenciada en El Vigía estado Mérida, mujer decidida, nunca rendida ante cualquier adversidad, contó su experiencia como madre de tres hijos, tiene 15 años laborando como cocinera en la Guardia Nacional, y dijo que ha sido “padre y madre para sacar a sus hijos adelante” en una entrevista realizada con motivo del Día Internacional de la Mujer.


¿Cómo se define?
Como una persona sencilla, emprendedora, inteligente, luchadora, buena madre, buena amiga y estupenda ama de casa.

¿Cómo ha sido su trayectoria?
Bastante difícil, ya que he sido padre y madre para sacar adelante a mis hijos. Desde un principio me ha tocado sola y todavía sigo trabajando para ayudar a mis dos hijas menores con el estudio, porque mi hijo mayor ya se casó y se independizó, pero me siento orgullosa de hacerlo.

¿Qué es lo más difícil de ser padre y madre para sus hijos?
Me ha tocado sola todo el tiempo, y nunca he contado con la ayuda de nadie
para ayudar a mis hijos, cualquier enfermedad, cualquier inconveniente que se me presentó con ellos, tuve que superarlo sola.

Tiene 15 años cocinando en la Guardia Nacional, ¿cómo ha sido su experiencia en ese trabajo?
Al principio fue difícil, por la falta de experiencia y la adaptación en ese tipo de trabajo, pero poco a poco fui agarrando el hilo y cada vez fue más fácil y allí estoy todavía.

¿Cuál es su mayor anhelo para el futuro?
Que mis dos hijas se gradúen y se realicen en la vida, y que se cumplan todas sus metas.


Un consejo para todas las mujeres que actualmente no cuentan con el apoyo del padre de sus hijos.

Sigan adelante, sí se puede, en esta vida todo es un sacrificio, pero luego de ver a sus hijos encaminados, se darán cuenta que todo ese esfuerzo valió la pena porque trajo consigo un buen beneficio.


María Regina García continuará sazonando la comida de los Guardias Nacionales hasta que llegue su jubilación, seguirá luchando para ayudar a sus dos hijas, verlas formadas como profesionales y quiere dentro de algunos años estar rodeada de muchos nietos.